F1

domingo, 6 de septiembre de 2009

FERNANDO EN OVIEDO




Alonso desata la locura en Oviedo y colapsa la ciudad
entre 100.000 y 150.000 aficionados que han salido a las calles para ver a su paisano



Entre 100.000 y 150.000 personas arroparon el sábado día 5 de septiembre del 2.009 al piloto asturiano Fernando Alonso en el último 'roadshow' del equipo ING Renault F1 que se ha celebrado en Oviedo, según las estimaciones de la Policía Local.
El centro de la ciudad se transformó en un circuito de unos 1,8 kilómetros de recorrido para que Alonso exhibiera su arte sobre el 'R28', un 'Megane Sport RS', un 'Megane CC' y un 'Megane Trophy', así como de un 'kart', a petición explícita del bicampeón del mundo.
Alonso quiso emocionar a la 'marea azul' en un día despejado y caluroso, para lo que hizo varios trompos en la parte del recorrido próxima a la Junta General del Principado frente a las gradas de autoridades, y llegó a superar los 260 kilómetros por hora en algunos de los tramos.
El piloto afirmó, en la rueda de prensa previa al espectáculo, que es una gran oportunidad para acercar a la gente un evento difícil de observar por las calles en las que hace su vida cotidiana. Así, remarcó que poco más de 15 ciudades en el mundo han podido ver este tipo de exhibiciones, entre ellas Oviedo.
Asimismo, Alonso mostró en todo momento su alegría. "Nunca te imaginas que algún día vas a estar aquí, delante de tu gente con un F-1 y todo el mundo va a estar expectante para verte", dijo. "Hoy ha llegado ese día y es algo que nunca olvidaré, y tendré para siempre en mi recuerdo", añadió diciendo que es uno de los momentos "más especiales" en su vida.
La cita, que se ha celebrado antes del Gran Premio de Italia en el trazado de Monza, y se ha convertido en la tercera exhibición que el piloto asturiano ofrece en España con Renault, después de Madrid 2003 (130.000 personas en el Paseo de la Castellana) y Sevilla 2006. En 2007 hizo una exhibición callejera junto a Lewis Hamilton en la Ciudad de las Artes en Valencia con motivo de la presentación mundial del McLaren 'MP4-22'.
Para esta ocasión el circuito urbano ha tenido un recorrido de 1,8 kilómetros desde la Plaza de América hasta la Plaza de la Escandalera de Oviedo, pasando por la calle Toreno y Uría, y en el que Alonso demostró su soltura para hacer trompos y arrancadas.
Alonso consiguió convencer al alcalde de la ciudad, Gabino de Lorenzo, para que se subiera con él en uno de los coches, aunque en uno de los más clásicos y a poca velocidad, ya que el regidor ovetense dijo no tener "valor" para subirse a un F-1. "Tuve el valor de tomar la decisión de que el evento se haga", apuntó minutos antes del 'roadshow', diciendo que no se atreve a las grandes velocidades.
Alonso cumplió las expectativas de su afición e incluso salió en un par de ocasiones del coche para sacar fotos del circuito, de los espectadores y de sí mismo con las cámaras de los asistentes, y al término del 'roadshow' descorchó una botella de champán y regó a quienes se situaban en las proximidades de la Junta General.
El público disfrutó con el espectáculo aplaudiendo intensamente, y los que disfrutaban del evento desde las gradas se levantaron cada vez que el piloto asturiano se acercaba. Así, después de varios años esperando la ocasión, el centro de la capital del Principado vibró con Alonso.
El bicampeón mundial de F-1 Fernando Alonso ha dicho en Oviedo que "nunca" olvidará la exhibición que ha ofrecido en su ciudad natal, donde más de 100.000 personas han presenciado el evento celebrado en un circuito urbano de la capital asturiana.
"Tu mejor circuito, Oviedo", recogía una de las pancartas que los aficionados, muchos de ellos llegados de fuera del Principado, habían preparado para su ídolo, que declaró: "Para quien no haya visto nunca una carrera de F-1 este será un día inolvidable".
Alonso ha realizado su primer paso por el circuito saludando desde un coche descapotable, con el periodista Antonio Lobato, desde el propio vehículo, comentando el instante, cuyo sonido se escuchaba por la megafonía instalada en las calles.
A continuación hizo su aparición con el kart, vehículo por el que el piloto asturiano, que entre sus triunfos incluye el título mundial en esta especialidad, ha ofrecido algunas de las acciones más llamativas.
Ha disfrutado el piloto con su conducción en las varias pasadas que ha realizado por el circuito, en las que ha aprovechado para deleitar a los miles de espectadores que seguían el acontecimiento.
También ha querido inmortalizar el momento para lo que ha conducido con cámara de fotos en mano recogiendo instantáneas del improvisado circuito en el que se había convertido la calle Uría, arteria principal de la ciudad, totalmente abarrotada de público.
A las 12:40 horas irrumpió Alonso a los mandos del F-1 por las calles de Oviedo ante un público expectante, que vio al asturiano dar varias vueltas por un circuito repleto de aficionados, que no cesaban de fotografiar y grabar el monoplaza por las calles de la capital asturiana. "Un evento como este es una oportunidad para ver un F-1 en la ciudad en la que vives, te permite ver un F-1 por la misma calle por la que mañana vas a hacer la compra", ha dicho Alonso, que ha comentado que esta exhibición se ha producido después de varios intentos.
Oviedo, según ha comentado, se suma así al grupo de menos de una veintena ciudades del mundo que han podido ver a un F-1 rodando por sus calles, a velocidades cercanas a los 270 kilómetros por hora.
Alonso ha revelado su "agradecimiento infinito" a la afición que le apoya, cuya presencia en los circuitos de los grandes premios ha hecho que otros pilotos, según reveló el ovetense, le preguntaran en sus inicios cuál era la bandera que portaban. "Hoy todos la conocen, y saben que es la asturiana", ha dicho.
La jornada ha incluido la entrega, de manos del alcalde de la ciudad, Gabino de Lorenzo, de una réplica de la nueva placa que será colocada en la calle en la que ha nacido el bicampeón mundial, que sustituirá el nombre Capitán Almeida por el de su vecino más universal, Fernando Alonso.